¿Está preparado para un segundo perro?

No hay nada malo en tener un solo perro en casa, pero formar tu propia manada también puede ser muy divertido. Hay que tener en cuenta muchas cosas a la hora de añadir un nuevo miembro a la familia: el temperamento del nuevo perro y del perro que ya tiene, la disposición de la familia a aceptar un nuevo perro y los nuevos gastos que conlleva una segunda mascota.

¿Solo o sola?

Piense en su perro actual antes de dar el paso y adoptar otro. ¿Es agresiva con los perros del vecindario? ¿Juega bien con los demás? ¿Y su comportamiento en el parque canino? ¿Muestra interés por otras mascotas?

Algunos perros pueden no estar preparados para otro perro. Por el contrario, si adoptas a un cachorro más joven, es posible que tu peludo actual, que se comporta bien, pueda ayudarle a aprender. Asegúrate (en la medida de lo posible) de que tus dos perros se lleven bien. Dos damas alfa rara vez encajan bien. Presente a su perro actual y a su posible nuevo perro en un entorno neutral, y vea cómo va. No es mala idea recurrir también a la ayuda de un adiestrador de perros profesional.

Todo en familia

Si tienes pareja, hijos o cualquier otra persona que viva contigo, asegúrate de que la adopción de un nuevo amigo sea una decisión de grupo. Quieres que tu nueva mascota se sienta bien acogida en su nuevo hogar, así que lo mejor es tener a todo el mundo de acuerdo mucho antes de empezar a estudiar la adquisición de un nuevo animal.

Conozca su papel

Una nueva mascota conlleva nuevas responsabilidades. ¿Sus hijos le piden otro perro? ¿Ha prometido su mujer ser la encargada del adiestramiento y el aseo? Recuerda que a menudo decimos cualquier cosa para conseguir lo que queremos. Dedica tiempo a discutir quién hará qué y anota las funciones y responsabilidades de cada uno de los miembros de tu familia.

Algunos perros requieren más mantenimiento que otros. Si estás acostumbrado a tener un chucho de pelo corto que se baña cada dos meses, añadir un Shih Tzu de pelo largo y suelto puede sacudirte el mundo. Tendrás que gastar más en el aseo y el cuidado de los ojos, y tendrás que invertir tu propio tiempo en el cepillado diario.

El doble de diversión… y de facturas

Es importante tener en cuenta las obligaciones financieras que conlleva la adquisición de una nueva mascota. Sin duda pagará más por la comida y las golosinas, y probablemente pague el doble por el aseo, los cuidados veterinarios y los productos. Por supuesto, si dispone de los recursos necesarios, la diversión será doble, así que adelante.